Mi
escena favorita. Los simios en un campo de concentración con los soldados en
formación. Los simios se comportan de un modo más humano que los humanos. Los
humanos de un modo más animal que los animales. Y, mientras, suena el himno de
Estados Unidos.
Porque
detrás de los simios puedes ver al pueblo judío, a los negros americanos o a
cualquier otro pueblo víctima de un genocidio. Son un símbolo del pasado y del
inevitable futuro. Es el proceso por el que los humanos, de tanto en tanto,
dejamos de ver al otro como persona; lo vemos como cosa y nos animalizamos.
En
un mundo de locura, de venganza, de violencia y traición, César sabe que la
misericordia es lo esencial, lo verdaderamente inteligente, lo que les llevará
a un mañana.
Muy
bien Woody Harrelson en un papel que tiene mucho del Marlon Brando
de Apocalypse Now. Y muy bien Andy
Serkis aunque se mueva bajo la captura de movimiento. Impresionante lo que
logran con esa técnica.
Esta
tercera parte vuelve a subir el nivel. Hay conflictos dramáticos, ideas de fondo,
profundidad en los personajes… Muy bien. No hay rellenos superfluos y el guión
se desarrolla con agilidad.
2 comentarios:
Bueno....me parecio flojilla...pero esa escena que comentas refleja exactamente lo que dices.
Bueno, no es Apocalypse Now ni un análisis profundo de la guerra o algo así. Pero para ser una peli de acción/fantasía/ciencia-ficción, tiene bastante fondo. Los tiros y bofetadas no son lo importante. Se curran a los personajes. Al menos los principales.
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