Al margen (207)

1. Javier Bardem y Penélope Cruz, dirigidos por León de Aranoa, realizarán Escobar. No le veo ningún sentido después de la serie Narcos pero vete tú a saber. Igual a la gente no le importa tanto que tenga interés como que salgan caras conocidas.

2. Steve McQueen, cambia de género tras 12 años de esclavitud. Cuatro hombres mueren en un robo y sus esposas se ponen de acuerdo para acabar el trabajo. Un planteamiento curioso. Y con Viola Davis.

3. Charlize Theron siempre se ha currado sus papeles a tope. Ahora le ha dado por engordar 15 kilos para hacer la película Tully. Supongo que habrá caído en la cuenta que es más fácil ganar kilillos que perderlos.

4. Pues sí: John Wick ha generado un grupo de fans lo bastante abultado como para que, en breve tenga secuela. Ya tiene fecha de estreno: 10 de febrero de 2017. 

Pilotos: Designated Survivor, The Exorcist, MacGyver, Lethal Weapon

Designated Survivor. A Kiefer Sutherland, secretario de vivienda, le ha tocado ser el designated survivor: pringa en la Casa Blanca mientras se celebra el Estado de la Unión. Explosión. Todo el gobierno muere, él se queda al mando. Nadie podrá acusarla de ser lenta. Además ya hay varias conspiraciones en marcha.

The Exorcist. Simplona, elemental, previsible, lo de siempre. Cliché tras cliché. Hay sí, de fondo, una trama que apunta a un recorrido más largo, pero se nota que es el anzuelo que se desarrollará en realidad en los últimos 10 minutos del último capítulo. Yo me bajo, no la recomiendo.

MacGyver. Incorporado al siglo XXI, MacGyver se trae un guardaespaldas y una hacker. Mucha fantasmada en plan ni la CIA sabe quiénes somos. Supongo que tendrá sus fans provenientes de la serie original. Yo me bajo, la recomiendo para ellos.

Lethal Weapon. Más loca, más enérgica y, sobre todo, más divertida que todas las anteriores. Es lo que imaginábamos pero su humor y su acción descerebrada son puntos a su favor. Seguiré algún capítulo más con ella. Probablemente me bajaré, pero es la típica serie que está bien para desengrasar con un capítulo suelto.

Lookouts

Este es uno de esos cortometrajes realizado por unos cuantos amigos (y unos medios no maravillosos, pero sí generosos) para ver si alguna productora pica y consiguen convertir su idea en un largo.

La verdad es que yo picaría. Quiero decir que está bastante bien. Una mezcla apetecible de Stranger Things y El señor de los anillos. Son unos pocos minutillos, un aperitivo, pero se ve que, detrás, hay potencial para una historia bien desarrollada.

Un basilisco representa el lado del mal. Lookouts. Habrá que tener una antena desplegada por si llega a algo más.

Secret City. Temporada 1

-Los cementerios políticos están llenos de personas que fueron leales a los idiotas.

La excusa para ver esta serie (no es buena excusa, pero es lo que hay) era la presencia de Anna Torv, a quien no veía desde Fringe. Y resulta que la serie es bastante interesante.

Anna Torv, aquí, es una periodista De esas que, cuando hace preguntas, son como balazos. Un día descubre un cadáver destripado junto al río al que la policía no le deja acercarse. Y como a ella no le parece que en el río haya tiburones, decide investigar un poco más.

La serie es interesante porque muestra algo que no es muy conocido: los tejemanejes políticos y diplomáticos de Australia con China, Japón, Estados Unidos. Un conflicto de intereses muy potente. Lo preocupante (se ve que en todos los sitios cuecen habas) es que la prensa ha alabado su realismo, han elogiado que muestre tan fielmente cómo funciona la política australiana.

El final es bastante desolador. Espero que haya segunda temporada. No para que lo mejoren necesariamente, sino porque me pareció una intriga muy bien llevada durante seis capítulos.

Muy bien Jacki Weaver (tan malvada y manipuladora) y Damon Herriman (el palurdo Dewey de Justified a quien el año pasado le di un premio al peor vestuario) en el mejor papel de transexual que he visto.

El hombre de las mil caras

-Te estoy diciendo la verdad.

-Para eso hace falta mucha práctica. Y a ti te falta.

Paesa y Roldán. La cuestión no es que fueran dos corruptos de mucho cuidado. La cuestión es que, en 30 años, el problema no ha hecho más qué crecer. Los políticos no han tomado ninguna medida para atajarlo. Claro, ¿para qué atajarlo si son los principales beneficiarios? Algunos se quedan en la cuneta, obviamente.

Esta es la historia de un ganador y de muchos perdedores. Alberto Rodríguez construye muy bien su historia, presentando personajes y mostrando sus relaciones. Quién es quién y cómo todos engañan a todos.

Creo que ese afán de claridad perjudica el ritmo en alguna ocasión. Pero es una historia muy bien planificada, muy elegante y con una unidad de estilo llamativa. No crea una atmósfera tan intensa como en La isla mínima, pero sí nos absorbe para llevarnos a ese mundo de pisos de lujo, pisos francos, despachos ministeriales, bancos, aeropuertos y suciedad moral.

Flipé con la sobrina de Paesa.

Florence Foster Jenkins

Florence Foster Jenkins es una ricachona filántropa amante de la música que se considera a sí misma una gran soprano. Y es una cantante horrible. Su marido la apoya en todo con tal de verla feliz. Por ejemplo, en los conciertos, todo el público estaba pagado para que aplaudiese.

Y Meryl Strep, una vez más, está descomunal. Y qué bien la apoya Hugh Grant. Y al piano Simon Helberg alucina con todo el montaje pero, en fin, le pagan muy bien. Vaya caretos que pone.

Es una delicia ver cómo interpretan toda esa afectación, ese esnobismo, ese despliegue egoísta de vanagloria. Cómica, burlona y, a la vez, muy triste. El retrato de esa patética mujer, su bondad, su ingenuidad, su estupidez.

Uno de esos personajes tan absurdos que sólo puede basarse en la realidad. Su historia es tan conmovedora como majadera. Y el mundo de la música tan elevado en sus aspiraciones como mezquino en su práctica.

Los siete magníficos

¿Ves? Este remake es un buen remake. La diferencia entre Los 7 magníficos de Fuqua y el Ben-Hur de Bekmambetov, es que Fuqua sabe hacer algo más que cortar, pegar, eliminar.

Fuqua respeta la historia y la reimagina. Tiene muchas influencias de Peckinpah (esa ametralladora), Tarantino (ese cazarrecompensas autorizado) y Sergio Leone (esa tensión prolongada de los duelos).

Sturges reimaginó correctamente Los 7 samurais de Kurosawa y nadie se quejó de ello. Era un homenaje y una reinterpretación. Fuqua hace lo mismo sin salir del western.

Hay una buena presentación de los 7, diálogos divertidos e ingeniosos y una planificación muy esmerada. Sí, vale, le sobran muchos minutos a la pelea final.

Muy bien Denzel Washington, Chris Pratt y Ethan Hawke.  D’Onofrio un poco pasado de vueltas pero es un personaje rarito que lo exige.

-Así que usted quiere venganza.

-Quiero justicia. Como debe de ser. Pero la venganza me vale.

Al margen (206)

1. Blindspot es lo que es. Acción, capítulos procedimentales, una subtrama de largo recorrido. Pero tiene alicientes. Y la aparición de Archie Panjabi en el 2x01 es otro incentivo más. Parece que la tendremos durante toda la temporada.

2. El tráiler de Crisis in Six Scenes, la serie de Woody Allen tiene una pinta impresionante. Ya falta poquito.

3. Mary Elizabeth Winstead ficha por Fargo. Me parece una buena incorporación. Ya ha demostrado en Calle Cloverfield 10 y en BrainDead que tiene tablas para moverse con soltura en esa línea marciana entre comedia/drama/absurdo/realismo.
4. TVE ha renovado El Ministerio del Tiempo. Y, al parecer, aportan más presupuesto para que la cosa sea vistosa. De momento una temporada más. Luego ya se verá.
5. El spin-off de The Good Wife está en marcha y la secretaria de Diane será Marissa, la hija de Eli. Parece que se convertirá en la nueva investigadora. Ya dije que me encantaba esa chica.

Ice Fantasy 1x01

Esta es la respuesta china a Juego de Tronos. Había leído cosas y ya no aguantaba más la curiosidad.

Difícilmente se puede ser más hortera. Un pastiche kitsch de inmensas proporciones, unos efectos especiales vergonzosos, unas interpretaciones lamentables, unos colorines estridentes…

El problema es que podría convertirse en una serie adictiva a poco que uno se deje llevar. Es tan mala que no puedes dejar de verla, te tienta a comprobar qué nueva majadería vendrá a continuación.

Uno podría pensar que, después de un capítulo, habrían cancelado la serie y que sus responsables habrían sido deportados. Y resulta que lleva más de 60 capítulos.

Hay que verlo para creerlo porque si te digo que hay unos elfos bailando vals, no me creerías. Y los hay. Que sí, de verdad que los hay.

No he visto peor gusto estético en toda mi vida.

Por favor: que alguien mate a la sirena.

Dark Matter. Temporada 2

El arranque de los primeros capítulos en la cárcel, la fuga y las nuevas relaciones que se establecen entre los personajes me gustaron bastante.

Luego vienen los capítulos más o menos procedimentales. Tenemos de fondo una guerra entre corporaciones galácticas a punto de desatarse y nuestros chicos de la Raza son el centro de atención.

Creo que tocan demasiados instrumentos a la vez para una orquesta que sigue sin definir su objetivo. Quizá lo tienen todo bien atado, pero hay demasiados elementos en juego. El aparatito que les permite teletransportarse, los videntes, los clones del universo alternativo, la androide y su potencial humanidad, la androide y su proyección, los clones en general, Ryo y su empeño por volver a Zairon…

Todo presentado como si fuese parte de la trama general. Pero no lo es. Al menos de momento. Muchas de esas cosas son capítulos aislados y… otro tema. De modo que lo que parecía relevante y fundamental para la trama, se queda en poca cosa.

Sigue resultando bastante entretenida. A falta de cosas mejores en ciencia-ficción, seguiremos pendientes de ella.

The Kettering Incident. Temporada 1

Están bien estos ocho capítulos pero con cuatro habría estado mejor. Conecta en muchos puntos con Jordskott y, al igual que la serie nórdica, tiene un problema gordo: la prolongación innecesaria del misterio. Más que aportar suspense acaba por cansar.

Una niña desaparece, la chica que estaba con ella se va a Londres, se convierte en doctora hematóloga y ahora vuelve para averiguar qué paso en sus tierras australianas. Nadie la quiere por allí. Su padre el que menos.

Y en cuanto ella llega, otra chica desaparece. La serie juega bien con la idea de los lugareños que piensan que es cosa de ovnis y extraterrestres. Sí lo es, no lo es. Ya digo que la prolongación de ese interrogante se alarga demasiado pero funciona como eje.

No sé si tendrá segunda temporada. Espero que no. Si la hay, que no cuenten conmigo. Lo que había que contar ya está contado.

Sólo si te gustó Jordskott.

Morgan

Un óvulo fecundado y nano-robots. El primer modelo biotecnológico. Hay que comprobar si es un producto comercial rentable.

-No le ponga género. No lo tiene.

-Oh. Está tan equivocada, señorita Weathers.

Esta película llega un año tarde. Ya se hizo Ex Machina. Además Morgan tiene un inconveniente añadido: sabemos que Morgan tiene inteligencia, voluntad, conciencia. Lo más interesante de Ex Machina eran esos diálogos, ese test de Turing, ese verificar la existencia o ausencia de conciencia en una máquina.

Morgan busca un poco más la línea de acción, especialmente en los últimos minutos. Está bien llevada y entretiene. Sin embargo, sabe a poco y el giro final no impacta tanto como sus responsables pretenden. El reparto tiene gente conocida y eso aporta algo de energía, especialmente la entrada de Paul Giamatti.

Sí agradezco su ausencia de sentimentalismos, su frialdad, incluso su crueldad. No hay medias tintas. Las máquinas pueden ser desalmadas pero nada en comparación con ciertos hombres de negocios.

Los hombres libres de Jones

1862. Guerra civil americana. Newton Knight lucha en el bando confederado pero es una guerra que no entiende. Sin esclavos, enamorado de una mujer negra y harto de los desmanes del ejército, decide crear su propio ejército de negros y desertores y convierte el Condado de Jones en una república.

Una película, desgraciadamente, muy anodina. Es un ejemplo claro de cómo el didactismo, su afán por denunciar injusticias, destruye la historia, el drama, el ritmo, la psicología de los personajes.  Gary Ross rueda una escena, coloca su mensaje y pasa a otra. Sin emoción alguna. No le interesa para nada lo fílmico. Cree que es suficiente citar los abusos contra los afroamericanos.

Y no, no vale. Tenía potencial para alcanzar la fuerza de 12 años de esclavitud pero, después de dos horas y veinte cansinas, sólo logra una anécdota que apenas deja huella.

Da igual que tengas a Matthew McConaughey y a Gugu Mbata-Raw. Ni siquiera encuentran espacio para definir a sus personajes.

Al margen (205)

1. Ahora me ha dado por las miniseries australianas. Estás avisado. En las próximas semanas iré comentando algunas de ellas.

2. Hace poco expresé mi sorpresa porque Denis Villeneuve fuese a dirigir una peli de ciencia-ficción: La llegada. Pues parece que el tío le ha cogido gusto y ahora quiere ponerse al mando de Blade Runner 2 y de Dune.

3. Helen Mirren, por su parte, vuelve a sorprender con otro papel bien diferente en su carrera: una de terror. Se titula Winchester. Aunque supongo que, con ella de prota, será un terror diferente al habitual.

4. Y en Fool Me Once hará algo en esa línea Julia Roberts. Una piloto de operaciones especiales que tiene alucinaciones en las que ve cómo su marido muerto juega con su hija.

BrainDead. Temporada 1

10 razones para ver esta serie:

1. Por You might think de The Cars. Que les guste a los aliens es una razón para odiarla. Y si no la odiabas, la odiarás después de tanto oírla.

2. Por los previously musicales.

3. Por Mary Elizabeth Winstead.

4. Porque recuerda por igual a El Ala Oeste de la Casa Blanca, a Mars Attack y a La invasión de los ultracuerpos.

5. Porque es la serie más desconcertante que se ha emitido este año.

6. Por los títulos extra-largos.

7. Porque sólo aquí es posible oír frases de este estilo: Mi padre es un insecto o Esnifar algas no hará que te sientas mejor.

8. Por Robert y Michelle King, claro.

9. Por considerar que las estupideces de los políticos son tan grandes que sólo se justifican si tienen medio cerebro.

10. Por la repelente escena en la que vacilan a Michael Moore.

Razones para no verla:

1. Para la mayoría de la gente las razones para no verla son las mismas por las que yo la veo.

El último rey

-¡Bienvenido a Ragnarok!

Haakon Haakonsson es una de los reyes noruegos más apreciados en la historia del país. Gobernó en el siglo XIII, durante su reinado hubo paz, sabía que la cultura era importante y estableció lazos con cuantas naciones pudo. Prueba de ello es que su hija Cristina está enterrada en Covarrubias, casada con un hermano de Alfonso X.

La peli es simple: Gisle quiere convertirse en rey, pero en la línea sucesoria el bebé Haakon se lo impide, así que lo busca para matarlo.

Es una historia con persecuciones y batallas en la nieve, una huida, una madre que reclama el trono para su hijo. Bien rodada, con espectaculares escenarios de nieve y auroras boreales.

En la línea de Vikings no trata de ser llamativa a toda costa. Se ajusta bien a los usos y costumbres de la época, a la rudeza de sus gentes, a su idea del honor, de venganza, de derecho.

Se echa en falta algo más de complejidad pero resulta entretenida.

Secuelas y fracasos

La más sonada, claro, fue Ghostbusters. 200 millones de recaudación en todo el mundo cuando se preveía, como mínimo (como muy mínimo) 400. He leído por ahí que la peli se merecía más pero que le han hecho daño las críticas machistas. En fin. Hay gente que no razona bien y que no filtra cuando escribe, pero eso siempre pasa.

He mirado los estrenos que hubo de secuelas y casi todas han sido un desastre de taqilla: Divergente: Leal, Kung Fu Panda 3, Mi gran boda griega 2, X-Men: Apocalipsis, Alicia a través del espejo, Independence Day, Tortugas Ninja, Ahora me ves 2, Ice Age, Ben-Hur, Star Trek: Más allá, La leyenda de Tarzán, Peter y el dragón (no mal, pero regularcilla).

Salvo alguna de superhéroes, creo que sólo han funcionado bien Expediente Warren: El caso Enfield y Jason Bourne.

No soy un experto en el tema y no he hecho un análisis a fondo. Pero creo que en los grandes estudios deberían empezar a pensar en que quizá compense filmar algo bueno en lugar de repetir algo malo.

Es sólo una idea. Yo la dejo ahí.

El principito

-Lo que es esencial es invisible a los ojos.

El gran acierto del director es saber que El principito es inadaptable. Así que, formalmente, no es El principito, pero su fondo sí lo es.

La Niña tiene todos los próximos años controlados minuto a minuto por su madre. Un plan para que sea rica, exitosa, famosa. Y la Niña lo acepta. Hasta que conoce al viejo chiflado Aviador. El Aviador le cuenta fragmentos de una historia en la que conoció a El principito. Y la Niña se verá obligada a partir en su busca.

Me parece una gran película. Ha captado la profundidad de la obra de Saint-Exupéry, lo refleja libremente, tiene un dibujo delicioso de diversos estilos y sabe hablar de la vida, la muerte, la memoria, la necedad de las vanidades tangibles y la importancia de lo esencial: la amistad, las cosas invisibles, la imaginación, la visión inocente, el asombro.

Más allá de adaptaciones infantiloides o de interpretaciones descerebradas, consigue capturar la esencia. La Ciudad de los Adultos tal vez se hace algo larga, pero la película en su conjunto está bastante conseguida.

Juego de armas

-Eso suena ilegal.

Cuando se supo que el ejército americano compraba todas sus armas a Dick Cheney, Bush obligó a diversificar la demanda. Ya sabes: libre competencia.

Por supuesto los grandes contratos eran para los grandes peces. Pero los ratillas podían hacer mucho dinero (muchísimo) vendiendo las migajas. Millones. Muchos millones. Y las migajas llaman a las migajas y hacen todo el pastel. Ahí es donde entran Efraín y David.

Una película sobre la suciedad de la guerra. Tras la guerra solo hay dinero. Y, tras el dinero, hay intereses, intermediarios, terroristas, países en la ruina y… más dinero. Dos veinteañeros que se hicieron ricos, se metieron en líos, salieron de ellos, se metieron en otros más profundos… Es una de esas historias tan absurdas que no te la podrías inventar si no hubiese ocurrido realmente.

No es una gran película pero se ve con facilidad y da una idea de la cantidad de gente que se forra enviando a otros a morir.

Ana de Armas se ha hecho un hueco importante en el reparto y cumple bien su papel. Y sí, se podrían hacer chistes sobre la actriz Ana de Armas en Juego de armas. Pero creo que todos serían chistes malos.

-¿Cuándo ayudó a alguien decir la verdad?

Blood Father

Lydia es una chica de 17 años y, como buena hija, ha decidido seguir los pasos de su padre (Mel Gibson) y hacerse delincuente. Pero ahora Lydia está en problemas, acusada de una serie de asesinatos y es buscada tanto por la policía como por sus antiguos socios. Sí. Disparó a su jefe y novio. 30.000 dólares por la cabeza de la niña.

Y aunque papá está con la condicional no va a dejar así las cosas, con un grupo de tipejos persiguiendo a su criaturita.

Economía de medios y la historia de siempre. Pero contada con intensidad y fuerza allí donde hay que poner la carne en el asador. Ni tiroteos espectaculares ni locas persecuciones. Las cosas en su justa medida. Un tipo, su hija y la relación entre ambos. Momentos difíciles en los que se conocerán mejor de lo que nunca han hecho. Entre tanto, atacan, son atacados y la van liando allí por dónde pasan.

Bien. Una película brusca, con arranques de violencia, en la que el paisaje desértico evidencia la aridez de sus vidas.

Al margen (204)

1. El Ministerio del Tiempo ha demandado a Sony Pictures y NBC por plagio. En breve veremos Timeless y, al parecer, las semejanzas son muchas. Veremos en qué queda la cosa. Al parecer Sony tuvo hace años los guiones en sus manos y no les vio futuro. Ahora, después de que otros corren el riesgo, parece que sí.

2. Y seguimos con El Ministerio del Tiempo porque, a fecha de hoy, RTVE aún no la ha renovado y su futuro pende de un hilo. Ahí aparece Netflix, que podría convertirse en la nueva productora si los acuerdos salen adelante. Y eso sería, tan, tan, tan genial… más dinero, duración adecuada, guiones más ágiles…

3. Lo importante es que hablen de uno aunque sea mal. Esa es una gran verdad. Lo saben los políticos y lo sabe Escuadrón suicida, que ya está cerca de los 700 millones de dólares. Preocupante.

The Neon Demon

Sin fecha de aparición en España, sería muy comprensible que esta película no se estrenase por estos lares. 2016, entre otras cosas, estará marcado por ser el año en que que Nicolas Winding Refn perdió (definitivamente) la chaveta y se lo dijeron claro en Cannes.

Winding Refn siempre querrá ser David Lynch aunque sus dotes nunca sobrepasarán las de de Michael Bay. En Drive tocó techo.

The Neon Demon pretende ser una crítica al mundo de la moda. Un descenso al infierno demente de los cuerpos anoréxicos vendidos como elegancia. Eso pretende. En realidad es una película muy machista, misógina, a veces incluso hasta puntos aberrantes.

Es una percepción de la feminidad puramente como objeto. Todas las mujeres (todas) que aparecen en la peli piensan en una sola cosa: su cuerpo. Y no hay nada más.

Y Winding Refn, por mucho esteticismo extremo que busque, no logra que la película nos interese, nos conmueva, que empaticemos con alguien, que haya una psicología detrás de los personajes. Al fin y al cabo las cosas no tienen psicología, ¿no?

Aburrida, lenta, sin nada que contar salvo la obviedad.

No respires

Dos chicos y una chica entran a robar en una casa. Es un plan sencillo porque el único ocupante es un ciego. Pero el problema es que el ciego es un bicho de mucho cuidado.

Elegante en la planificación y con un guión muy bien controlado. Tiene sus incoherencias y sus pequeñas trampas pero logra una tensión en aumento realmente impresionante.

Hay un giro de guión fabuloso, allá por el minuto 45. Me parece que le sobran unas cuantas vueltas al final. Fede Álvarez demuestra lo fácil que es hacer una peli de terror solvente. Claro que, esa facilidad, está al alcance de pocos.

Unos pocos personajes, una casa, un par de buenas ideas bien colocadas aquí y allí. Y a desarrollarlas con pulcritud.

Muy entretenida pese a algunos defectillos.

Criminal

Kevin Costner, Ryan Reynolds, Gary Oldman, Tommy Lee Jones, Jordi Mollá, Gal Gadot, Alice Eve, Antje Traue y Amaury Nolasco.

Un reparto así y la crítica, en general, no se ha cortado un pelo a la hora de destrozarla.

En cierto modo lo entiendo. Es una mezcolanza de géneros muy extraña. Espías, ciencia-ficción, acción, drama y un puntín final de ternurismo. Como juntar Jason Bourne con Fringe. Y entiendo que ciertos giros de la trama están muy traídos por los pelos.

Claro que transferir la memoria de un agente de la CIA a un sociópata es forzar la credulidad. Y también lo es que al Holandés, el genio informático, no se le ocurran modos más sencillos de conseguir 10 millones. Si piratea todos los misiles de Estados Unidos más fácil sería piratear un banco. Digo yo.

Pese a todo agradezco el discurrir de su trama. Con una mezcla así, las cosas se mueven con otro ritmo y otras dinámicas. No es el típico guión cliché. Y Kevin Costner lo hace bien, encarnando el desconcierto de ese tipo que descubre sentimientos.

Entretenida siempre que estés dispuesto a aceptar rarezas.

Ben-Hur

Timur Bekmambetov agarra el original y le recorta dos horas. Un resumen que, como todo resumen, tiene unos problemas de ritmo brutales. A ratos lenta, a ratos con múltiples situaciones precipitadas.

Le cuesta arrancar 30 minutos. Después todo sucede deprisa: galeras, liberación, amistad con el árabe… Y luego todo se mezcla y embarulla: carrera de cuadrigas, crucifixión de Jesucristo, curaciones, hacer las paces…

Bekmambetov tiene buenas intenciones y, para demostrarlo, no hay balas con efecto, no hay coches corriendo por las fachadas de los edificios, no hay vampiros en trenes.

Pero no supera a la original en ningún momento. En los aspectos dramáticos pierde por goleada, en los épicos se queda muy corto y, casi 60 años después, con todos los efectos digitales a su alcance, no logra mejorar la limpieza de planificación y la espectacularidad de la carrera de cuadrigas.

Diría que es para aquel que no ha visto la original y no quiere invertir 4 horas de su tiempo. Pero hazte un favor: no te arrepentirás de invertir 4 horas de tu tiempo viendo la original.

Al margen (203)

1. Para algunas personas que viven en Matrix, la noticia importante de la semana era que seguimos sin presidente del gobierno. Álvaro, que tiene las cosas claras y los pies en el suelo, me envío la noticia de que Stranger Things… ¡renueva por una segunda temporada!

2. No soy un fanático artúrico, pero sí me interesa el tema con moderación. Me enteré de un proyecto de serie llamado Camelot y me informé. Y resulta que ocurre en Manhattan y es de un trío que debe luchar contra el mal. Total que podría titularse Cazafantasmas o The Librarians. Guy Ritchie está detrás, pero…

3. Por cierto. Parece que el rey Arturo aparecerá también en la próxima peli de Transformers. 

4. Mel Gibson confirma que está trabajando en The Resurrection. Supongo que vió la reciente Resucitado y decidió que no podía dejar así las cosas. A ver cómo le sale, porque el tema es más difícil que La pasión de Cristo. Mucho más.