16/11/08

Bella

Petición de la afición: Bella.
Llevaba el miedo en el cuerpo porque, desde hace dos años, mucha gente bienintencionada me había cantado excelencias de esta película por cuestiones extracinematográficas: con valores, pro-vida, profundamente humana...
No sabía si me iba a encontrar con un catecismo o con una nueva Declaración de Derechos Humanos de la ONU.
Me gustó su estructura. 24 horas más un epílogo. Y asuntos de años antes o de una semana después tratados como flash backs y flash forwards insertados dentro de esas 24 horas.
Hay veces que se pone demasiado sentimental. La familia de Eduardo Verástegui es demasiado perfecta, como sacada de Vive como quieras o cualquier otra película de Frank Capra. Pero también hay situaciones dramáticas tan potentes como la del atropello que son dignas de Crash.
En fin, sin ser una obra maestra, está por encima de la media.
En cuanto a Camorra, de momento no la he visto. Una de las cosas que aprendí en Historia del Arte fue a detestar el neorrealismo italiano. No me apetece nada pero, tal y como está la cartelera, quizá acabe cayendo.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Dado que hasta mi abuela fue a verla (literalmente), yo me piqué y también fui. A mi me pareció un dramón de mucho cuidado. Había dos niñas a mi lado que no pararon de llorar. Y una pandilla de señoras, que no se habían enterado de nada, discutían a la salida.
Si lo importante en esta película es el mensaje, creo que el final es muy poco claro. Y, para terminar, si lo que ocurre al final es tan bueno para todos (para los tres en cuestión: él, ella, lo que viene en camino) ¿por qué él tiene la misma pinta de atormentado en el epílogo?
Sinceramente, no dan ganas de parecerse a ninguno; y eso es tratar con muy poca cercanía el problema.

Individuo Kane dijo...

Respecto al tormento de él creo que es lógico: piensa que, si puede salvar una vida, eso será algo así como reparar la que vida que quitó. Y las cosas no funcionan así. Sigue hecho polvo.
En cuanto a la cercanía, no estoy seguro de que lo pretenda. De hecho creo que quizá por eso la peli me gusta y que precisamente por eso la secuencia familiar es la que, en mi opinión, sobraba: demasiado empeño para que nos cayeran bien. El distanciamiento es bueno, creo.
Imagino que, la mayoría de los espectadores, esperábamos que chico y chica acabasen juntos. Y no parece. Eso, la verdad, sí que es raro.